“Mi amor por el arte nace conmigo y gracias a mi padre”.
Su padre, Emiliano Luján, reconocido escultor boliviano hizo varios monumentos emblemáticos:
– Eduardo Abaroa,
– Cristo de Santa Cruz,
– Cristo de Tarija,
– Monumento a Humbolt,
– Monumento a Busch,
“Ramiro Luján es una persona libre, siempre lo fue, sin muchas limitaciones y siempre hizo lo que quiso hacer y siempre seguirá haciendo eso. Voy a morir con mis herramientas y voy a seguir haciendo arte hasta el fin de mis días”.